El responsable de la DGT ha afirmado que "no va a entrar a rebajar la exigencia", porque "estamos hablando de seguridad vial". "No estamos dispuestos a dejarnos arrastrar a sector de la 'low-exigencia", ha resaltado.

Pere Navarro ha realizado estas declaraciones durante su comparecencia ante la Comisión de Seguridad Vial del Congreso, donde ha acudido este jueves, requerido por el Partido Popular, para explicar las razones por las que el Gobierno "es incapaz de garantizar el servicio público de exámenes para la obtención de los permisos de conducir en las Jefaturas Provinciales de Tráfico".

Navarro ha puesto en valor el trabajo de los funcionarios y examinadores de la DGT durante los meses de julio y agosto, porque, según ha enfatizado, han renunciado a sus vacaciones para hacer horas extras y ayudar a salvar la situación en la que se había quedado el sector tras el estado de alarma.

Gracias a este esfuerzo, su departamento ha podido realizar en los dos meses de verano unas 549.000 pruebas, lo que son 50.000 más que en el mismo periodo del año anterior.

Además, Pere Navarro ha destacado que han tenido que lidiar con el cierre de todas las jefaturas durante el estado de alarma y con que, debido al confinamiento, muchos jóvenes han decidido continuar su formación a través de las opciones que las autoescuelas ofrecieron como clases online o trabajo telemático. Esto provocó, según ha indicado el director de Tráfico, que al reabrir hubiera "una bolsa" de alumnos esperando a para examinarse.

Es por ello, que ha reprochado a las autoescuelas que se manifestaran en algunas ciudades este verano.

Respecto al refuerzo de la plantilla de examinadores, Pere Navarro considera que "con la que está cayendo", debería realizarse "un mayor esfuerzo" para "remangarse y buscar soluciones" y cree que las manifestaciones "no son la solución".

De todas formas, Navarro ha reconocido que faltan examinadores, pero ha indicado que es más complejo de lo que parece. Ha señalado que el pico de actividad es en verano y Navidad, "cuando los jóvenes tienen vacaciones", pero señala que no se puede tener una plantilla dimensionada para afrontar sólo esos dos periodos y cree que es mejor reforzar la plantilla en estas épocas.