A menor experiencia al volante, coches con menos potencia. Es la idea que Tráfico estudia aplicar a los conductores noveles.

Es decir, limitar su manejo en función de los años de carné. De esta manera se evitaría, según Pere Navarro, que al día siguiente de sacarse el permiso de conducir, un conductor pueda ponerse a los mandos de un vehículo de gran cilindrada.