Durante la semana que ha durado la campaña, los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil han controlado un total de 553.651 vehículos y han efectuado 8.283 controles en los que han denunciado a 8.548 conductores, según ha detallado en un comunicado la DGT.
La infracción más numerosa (42,7 % de las denuncias formuladas) sigue siendo conducir sujetando con la mano el teléfono móvil, a pesar del riesgo que conlleva y de la pérdida de 6 puntos del permiso que lleva aparejada. Así, de las 8.618 denuncias interpuestas, 3.687 lo fueron por esta causa.
Después de esta, las infracciones más frecuentes fueron abrocharse el cinturón mientras se conduce, generalmente cuando han sido vistos por los agentes y por la que han sido denunciados 524 conductores, o el uso de cascos o auriculares conectados a aparatos reproductores de sonido, distintos del teléfono móvil, una conducta que está prohibida y por la que 393 conductores han sido denunciados.
Otras de las acciones más cometidas por implicar una distracción en la conducción son la lectura (247), la búsqueda de objetos (178), distraerse con otros ocupantes del vehículo (107) o conducir comiendo (90). Además de todas estas actuaciones concretas, los agentes formularon 1.644 denuncias por otras infracciones que provocan distracción en la conducción.
Por último, estos controles preventivos han permitido también detectar y sancionar a 785 conductores que, además de haber sido denunciados por cometer una distracción al volante, conducían con tasas de alcohol superiores a la permitida y a 793 que dieron positivo en otras drogas.