Los datos provisionales del Área de Medio Ambiente y Movilidad señalan que el Consistorio madrileño ha recaudado 83,9 millones de euros por vía voluntario, la que conlleva un descuento del 50% a los infractores, y que supone un 14% más de lo ingresado el año anterior (10,4 millones de euros más).
A esta cantidad hay que sumar también el resto de las multas que sobrepasan el periodo de pago voluntario, que se tramitan por vía ejecutiva.
De los 2,9 millones de multas impuestas en 2017 (un 0,76 % más que en 2016), 964.967 corresponden al SER, que descendieron un 0,9 % con respecto a 2016; y 656.577 por accesos no autorizados a las Áreas de Prioridad Residencial, que aumentaron un 14,6 %.
Por exceso de velocidad se registraron 598.284 sanciones, lo que supone un 6,7 % menos que el año anterior, mientras que las multas por superar los semáforos en rojo (foto-rojos) descendieron un 35 % (18.000 multas menos), pese al incremento de 9 dispositivos más desde septiembre de 2016.
Este 2017 se ha registrado también un leve incremento en el tráfico rodado en general, siendo por ejemplo de un incremento del 0,32 % en la M-30 en términos interanuales.
El Ayuntamiento destaca la reducción de las infracciones consideradas "graves", de exceso de velocidad y de los dispositivos foto-rojo, lo que indica "un mayor cumplimiento de las normas de circulación más determinantes en la seguridad vial".
Sobre el incremento de las multas por acceder a las áreas de prioridad para residentes, el Consistorio señala que en los meses de enero y febrero de 2016 no se formularon denuncias por esta cuestión hasta que comenzó a funcionar en marzo la APR de Ópera.
El Ayuntamiento destaca el incremento del pago de las sanciones durante el periodo voluntario, que ha aumentado este año un 11 % con respecto a 2016, alcanzando las 1.480.374 multas.
Un tendencia que se registra desde 2007, cuando se abonaron de forma voluntaria 523.493 sanciones de un total de 4.347.887, es decir, tan solo el 12 %, pero 10 años más tarde el porcentaje supera ya el 50 %.
Además, en 2017 se inició la notificación de denuncias a conductores residentes en otros países, que ha supuesto el cobro de 7.266 multas con una recaudación de 381.429 euros.
A partir de febrero, el Ayuntamiento cambiará el formato de las multas para que sean más claros, comprensibles y visuales, con el fin de facilitar que el infractor lo entienda y mejorar la comunicación entre la ciudadanía y la administración.
Ya en noviembre de 2017 entró en vigor un nuevo procedimiento para que las sanciones del SER incorporaran una fotografía que acreditara la infracción y que se incorporara al expediente administrativo, proporcionando mayores garantías a las personas denunciadas.