Con esta inciativa, enmarcada en la Operation Truck&Bus, desarrollada por la asociación RoadPol (European Roads Policing Network), los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil, policías autonómicas y locales controlarán las condiciones en las que circulan este tipo de vehículos, independientemente del país en el que estén matriculados.

Los agentes controlarán la velocidad, las horas de conducción y descanso, el tacógrafo, el exceso de peso, los defectos técnicos del vehículo o la seguridad de la carga transportada, entre otros factores.

La vigilancia se llevará a cabo en todo tipo de vías y en cualquier hora del día, especialmente se vigilarán las carreteras en las que la intensidad de circulación de estos vehículos suele ser mayor.

Los camiones representan el 7% de los vehículos y están implicados en el 5% de los accidentes con víctimas en España (datos de 2019). Cuando están involucrados en un siniestro vial suele ser más grave debido a las masas y dimensiones de los vehículos.

Por su parte, los autobuses representan el 0,2% del total del parque automovilístico y están implicados en un 2% de accidentes con víctimas.

El denominador común de los accidentes de tráfico en los que se ven involucrados estos vehículos es que la mayoría de las veces las víctimas suelen ser terceros, es decir, los que viajan en un vehículo diferente.

El tráfico de vehículos ligeros se ha reducido en un 40% con la pandemia. En el caso de los vehículos pesados esta reducción ha sido de un 7% de media (-5,59% en días laborables y un -20,29% durante el fin de semana)