Este verano se han producido 185 accidentes mortales (un 7% menos) y un total de 821 personas han requerido hospitalización (un 8% menos).
En concreto, durante el mes de julio se produjeron 105 accidentes mortales en los que fallecieron 114 personas, 3 fallecidos menos que los 117 registrados en julio del pasado año. Y en agosto se produjeron 80 accidentes mortales en los que perdieron la vida 88 personas, lo que supone diez fallecidos menos que en el mismo mes de 2019. Según ha recalcado el ministro, se trata del agosto con menos fallecidos de la serie histórica.
Los días con más siniestralidad fueron el 5 de julio, con una decena de fallecidos, y el 22 de agosto, que registró 8 muertos, aunque en este mes de agosto hubo dos días sin ninguna víctima mortal y el 76% de los fallecidos se produjeron en carreteras convencionales.
En este tipo de vías hubo 153 fallecidos, frente a las 150 víctimas del año anterior. Por el contrario, en autopistas y autovías perdieron la vida 49 personas, cuando en 2019 el verano registró 65 muertos. "La cifra de 49 muertos es la más baja de la serie histórica en autovías y autopistas", ha remarcado el ministro.
Por usuarios, este verano ha registrado 84 muertes de usuarios vulnerables, lo que suponen el 42% del total de víctimas mortales: 20 peatones, cuando en 2019 fallecieron 14; 9 ciclistas, frente a los 10 del año pasado; y 55 motoristas y usuarios de ciclomotor, cuando en verano de 2019 murieron 69.
En este sentido, se han reducido el número de fallecidos en todos los medios de transporte excepto en el de peatones y ciclomotor, que han aumentado. De hecho, el número de fallecidos en turismos este verano ha sido de 92, la menor cifra de la serie histórica.
Por tipo de accidente, la salida de vía sigue siendo el accidente con más víctimas mortales (representando el 47% del total de accidentes), con 95 fallecidos, seguida de la colisión frontal (19%), con 38 fallecidos. Entre los principales factores que causan estos accidentes se encuentran la distracción y el consumo de alcohol y drogas.
Según el balance de la DGT de este verano, el único grupo de edad que ha visto aumentada la mortalidad es el de los más jóvenes (entre los 15 y 24 años), pasando de 23 fallecidos en el verano de 2019 a 38 en 2020 (un 19% más).
El 27% de los fallecidos en turismo y furgoneta durante este verano no hacía uso del cinturón de seguridad (28 muertos) en el momento del siniestro, el porcentaje más alto en los últimos 10 años (20% en 2019). Además, 1 motorista, 1 usuario de ciclomotor y 2 ciclistas fallecidos no llevaban casco.
Las comunidades autónomas que han registrado mayores descensos han sido Cataluña (16 fallecidos menos) y Comunidad de Madrid (4 menos). Por el contrario, han aumentado en Cantabria y Castilla y León (1 fallecido más en cada región), en Baleares, Navarra y País Vasco (con 3 más en cada una), en Andalucía (4 más) y en Castilla-La Mancha (6 más).
En cuanto al número de desplazamientos, durante este verano se han producido un total de 82,8 millones de viajes de largo recorrido, un 9,18% menos que el año pasado, cuando se produjeron 91,2 millones. En julio, los desplazamientos fueron de 40,2 millones (un 7% menos) y en agosto de 42,6 millones (cerca de un 11% menos).
Los viajes de este verano han estado condicionados por la pandemia de COVID-19.