Dicho estudio está compuesto por dos partes diferentes: por un lado, analiza la siniestralidad de estos vehículos entre los años 2008 y 2013 y, por otro, el conocimiento sobre la normativa de circulación que afecta a los ciclistas.
Así, del “Análisis de la siniestralidad en ciclistas. 2008-2013”, elaborado por la Universidad de Valencia bajo la dirección del Catedrático de Seguridad Vial, Luis Montoro, se extraen significativos datos cuantitativos acerca de los accidentes ocurridos en ese lustro en nuestro país en el que algún ciclista se vio envuelto. La investigación, que se ha realizado a partir de la base de datos de accidentes oficial de la Dirección General de Tráfico (DGT), analiza un total de 25.439 accidentes con ciclistas y las 24.520 víctimas resultantes.
El casco, ausente en la mitad de los accidentes
En estos años, solo el 51,2% de los ciclistas llevaba puesto el casco en el momento de sufrir un accidente. Por edades, los datos muestran que los ciclistas de entre 0 y 14 años presentan el porcentaje más bajo en la utilización de este sistema de protección respecto al resto de grupos. Concretamente, solo el 15,4% de los niños utilizaba el casco en el momento del accidente. Del mismo modo, el grupo de entre 15 y 24 años representa otro de los colectivos con bajo porcentaje de utilización: tan solo el 27,1% de ellos estaba haciendo uso de este protector cuando se produjo el siniestro.
Para Josep Alfonso, director general del Centro de Estudios Ponle Freno-AXA, “Teniendo en cuenta la gran utilidad de este elemento de protección y su beneficio para evitar o disminuir la gravedad de las lesiones, resulta un porcentaje preocupante, muy inferior a lo que sería deseable”.
En relación a la importancia del uso del casco, los datos del análisis indican de manera clara que, en los ciclistas que resultaron muertos, la zona del cuerpo mayoritariamente lesionada fue la cabeza, indistintamente de cuál fuera su edad. Los porcentajes de lesividad en la zona de la cabeza en los ciclistas fallecidos se distribuyen de forma bastante uniforme entre todas las edades. Es importante señalar que, según la normativa actual, tan solo los menores de 16 años o los mayores que circulan en vías interurbanas están obligados a la utilización del casco.
El Centro de Estudios PONLE FRENO-AXA es un proyecto que nace, en mayo de 2013, un año después de la entrada de la aseguradora AXA como socio estratégico de PONLE FRENO. Desde su creación, entre otras acciones, ha publicado una decena de informes sobre siniestralidad y hábitos, y ha lanzado diversas campañas de concienciación. Todo ello con el objetivo de lograr el objetivo del Manifiesto Ponle Freno, “2020 Cero Víctimas”. Juntos, sí podemos.