A pesar de que aún no existen tratamientos definitivos para los pacientes con lesiones de la médula espinal, los avances para restablecer la función motora van por buen camino. El equipo de investigadores de la Facultad de Medicina de Indiana ha encontrado que, aunque no hay daño directo por LME torácica, el circuito lumbar sufre una neurodegeneración profunda, un descubrimiento que supone un nuevo objetivo terapéutico.

Por ello, en vez de centrarse en el lugar de la lesión, el grupo ha modulado circuitos lumbares preservados debajo de la lesión para mejorar la recuperación de la lesión de médula espinal o LME, con los que han demostrado que la neuromodulación de circuitos motores lumbares interrumpidos por la terapia neurotrófica mejora el rendimiento locomotor.

Además, las lesiones de médula espinal interrumpen las vías en el sitio de la lesión y afectan a los MN, unos antígenos producidos en la formación de anticuerpos y que puede causar la respuesta inmunitaria, debido a que provocan que sus dendritas se retiren o se deterioren por debajo de la lesión y, por tanto, conducir a una disminución del movimiento o de la función motora.

En relación a las LME, el equipo de investigación previamente había conseguido mejorar la recuperación locomotora previamente, además de reducir la atrofia dendrítica de MN después de una lesión modera y contusiva en el noveno nivel torácico, gracias a transportar Neurotrophin-3 (NT-3), un factor trófico que interviene a la supervivencia y al crecimiento neuronal, a los MN lumbares.

Con estos resultados, los médicos han determinado que una lesión moderada en el noveno nivel torácico detiene las proyecciones del tracto corticoespinal y del tracto rubrospinal hacia la médula espinal, pero que mantiene algunas transmisiones neurales que pueden reforzarse con la terapia NT-3; que la vía preservada, construida por una colección de fibras nerviosas, está asociada con la recuperación locomotora mediada por NT-3 después de la LME; y que la NT-3 favorece la recuperación de MN al promover el crecimiento dedrítico.