Los investigadores afirman que la reanimación cardiopulmonar salva vidas e instan a la gente a aprender a realizarla y a administrarla sin dudarlo a quien la necesite, independientemente del sexo, la edad o el lugar.

El doctor Alexis Cournoyer, médico de urgencias e investigador del Hôpital du Sacré-Coeur de Montreal (Canadá) y autor del estudio, explica que, en caso de emergencia, cuando alguien está inconsciente y no respira correctamente, además de llamar a una ambulancia, los transeúntes deben practicarle la reanimación cardiopulmonar. Así el paciente tendrá muchas más posibilidades de sobrevivir y recuperarse.

Realizaron, por tanto, este estudio para tratar de descubrir los factores que podrían disuadir a la gente de administrar la RCP, incluidos los factores que podrían disuadir a la gente de administrar la RCP a una mujer, añade la doctora Sylvie Cossette, autora del estudio.

Para ello, los investigadores utilizaron datos de registros de paros cardíacos que ocurrieron fuera del hospital en Canadá y Estados Unidos entre 2005 y 2015, incluyendo un total de 39,391 pacientes con una edad promedio de 67 años. Analizaron si un transeúnte realizó o no la RCP, dónde tuvo lugar la emergencia y la edad y el sexo del paciente.

Sólo alrededor de la mitad de los pacientes recibieron reanimación cardiopulmonar por parte de un transeúnte (54%). En general, las mujeres eran ligeramente menos propensas a recibir RCP (el 52% de las mujeres frente al 55% de los hombres).

Sin embargo, cuando los investigadores analizaron únicamente las paradas cardiacas ocurridas en un lugar público, como la calle, la diferencia fue mayor (61% de mujeres frente al 68% de hombres). Estas tasas más bajas de RCP en público se observaron en las mujeres independientemente de su edad.

Pero por otra parte, cuando los investigadores analizaron las paradas cardiacas ocurridas en un entorno privado, como un domicilio, los datos indicaron que con cada aumento de diez años en la edad, los hombres tenían alrededor de un 9% menos de probabilidades de recibir RCP durante una parada cardiaca. En el caso de las mujeres que sufrían una parada cardiaca en un entorno privado, las probabilidades de recibir reanimación cardiopulmonar disminuían en torno a un 3% cada diez años.

El estudio demuestra así que las mujeres que sufren una parada cardiaca tienen menos probabilidades de recibir la RCP que necesitan que los hombres, sobre todo si la emergencia se produce en público.

Según apuntan, la razón podría ser que a la gente le preocupe hacer daño o tocar a las mujeres, o que piensen que es menos probable que una mujer sufra una parada cardiaca. Por ello, se preguntaron si este desequilibrio sería aún peor en las mujeres más jóvenes, porque los transeúntes podrían preocuparse aún más por el contacto físico sin consentimiento, pero, como demuestran los datos, no fue así.

Por su parte, la doctora Cossette apunta que les gustaría estudiar esta cuestión con más detalle para entender qué hay detrás de esta diferencia, lo que podría ayudar a asegurar que cualquier persona que necesite RCP la reciba, independientemente de su sexo, edad o ubicación.

El profesor Youri Yordanov, del servicio de urgencias del Hospital St Antoine (Francia), que preside el comité de resúmenes de EUSEM 2023 y no participó en la investigación, indica que la RCP salva vidas, pero que lamentablemente no todas las personas que sufren una parada cardiaca reciben la RCP que necesitan. Este estudio da algunas pistas sobre por qué es así. Una parada cardiaca puede ocurrir en cualquier momento y lugar, por lo que, como asegura, todo el mundo debería aprender RCP y estar dispuestos a realizarla sin dudarlo.