La organización Oceana ha descubierto en el mar de Alborán, al sur de España, uno de los arrecifes de coral de profundidad más importantes y amenazados del Mediterráneo.

Según la organización, que se dedica a proteger los océanos del mundo, el hallazgo se ha producido durante una expedición de investigación y la mayor cantidad de especies fueron encontradas entre 300 y 500 metros de profundidad.

La mayoría de las colonias encontradas están muertas o están en peligro por el uso de diferentes actividades de pesca como el arrastre de fondo y el palangre, pero aún quedan extensas zonas con corales blanco a más de 300 metros de profundidad, explica Oceana en un comunicado. "Es doloroso ver que hay más volumen de corales muertos que vivos. Si las colonias vivas que hemos encontrado ya son de por si espectaculares, habría que imaginarse lo que llegaron a ser magníficos arrecifes antes de su deterioro", ha dicho Ricardo Aguilar, director de Investigación de Oceana Europa.

Los arrecifes de coral son considerados como hábitats de interés comunitario de la UE y los estados miembros, entre ellos España, y se deben crear áreas marinas protegidas para su conservación.