El estudio, que mejora el método de hacer censos de población, está liderado por José Jiménez, un investigador del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y miembro del Grupo de Investigación en Gestión de Recursos Cinegéticos y Fauna Silvestre del Instituto de Investigación en Recursos Cinegéticos (IREC), un centro de la Universidad de Castilla-La Mancha.

La captura-recaptura se basa en la identificación individual de animales silvestres con diversas técnicas de muestreo y el uso de información espacial, lo que permite obtener una estimación de densidad e información demográfica de gran utilidad en materia de gestión y conservación.

Uno de los problemas de estos métodos es que una parte de las muestras no permite la identificación por diferentes causas. Esto sucede con las imágenes de fototrampeo borrosas o las muestras de heces o pelo que, por algún motivo, no permiten la identificación.

Este nuevo método permite utilizar toda la información, tanto de muestras identificadas como sin identificación, lo que incrementa su precisión.

El sistema ha permitido determinar cuántos osos pardos hay en la Cordillera Cantábrica, lo que ha hecho posible una respuesta más precisa que otras estimaciones previas.

Este trabajo de investigación ha sido parcialmente financiado por el Ministerio para la Transición Ecológica del Gobierno de España.