"Madrugar es bueno para la salud porque el sueño y la vigilia es un proceso natural regulado por un reloj biológico que se pone en marcha y regula todas las funciones que influyen en nuestra actividad física por la mañana temprano, en torno a las 7, en cunato amanece", asegura en Objetivo Bienestar la psicóloga Yolanda Llave.