La siniestralidad de las motocicletas en el ámbito urbano e interurbano ha centrado la 24ª edición del Fórum Barcelona de Seguridad Viaria, una jornada de debate organizada por el RACC que la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha inaugurado y en la que han intervenido el director general de Tráfico, Pere Navarro, y el director del Servicio Catalán de Tráfico (SCT), Juli Gendrau.
La ponencia principal del acto ha estado protagonizada por Pierre Van Elslande, director de investigación del instituto francés de ciencias del transporte, planificación y redes (IFTSTTAR), que ha hablado sobre los principales problemas que tienen los conductores de motocicletas a nivel europeo.
Pierre considera que las motos se han desarrollado de forma "imprevista" y que los gobiernos se están adaptando de forma "espontánea" a la problemática.
Uno de los puntos principales de su investigación es el riesgo al que están expuestos los motociclistas en carretera. "No es que haya un mayor número de accidentes, sino que el riesgo de salir herido en moto es mucho mayor".
El riesgo de accidente por kilómetro recorrido aumenta un 120 % en el caso de las motos y la probabilidad de que éste sea de carácter mortal se eleva otros 30 puntos sobre las probabilidades de los coches, según los resultados de sus estudios.
Dos de los motivos principales de este tipo de accidentes, ha explicado, son la escasa visibilidad de las motos en la carreteras y el exceso de confianza de los conductores, que reducen en exceso su nivel de atención en carretera.
En la sesión inaugural, la alcaldesa de Barcelona Ada Colau ha recordado los 17 muertos en accidentes de tráfico en Barcelona este año, de los cuales nueve eran motoristas, unas cifras que ha descrito como "dramáticas".
La concejala de Movilidad, Mercedes Vidal, ha criticado que los conductores de coche reciban de forma automática a los dos años el permiso A1 para motocicletas, una medida que cree que debería "revisarse".
Por su parte, el director general de la DGT ha mantenido la línea del resto de ponentes y ha declarado que una ciudad que no apuesta por la movilidad solo puede derivar en "caos", "contaminación" y "accidentes".
El director del SCT, Juli Gendrau, propone localizar las zonas de mayor siniestralidad y elevar todo lo posible la presencia policial en dichos puntos para evitar que el número de víctimas aumente.
Asimismo, el presidente del RACC, Josep Mateu, ha defendido la implantación de un carril exclusivo para motocicletas en el acceso a la ciudad de Barcelona para regular su velocidad y reducir el número de accidentes.
La directora de la asociación de Prevención de Accidentes de Tránsito (PAT), Yolanda Doménech, ha hecho hincapié en la regulación de los límites de velocidad porque considera que en Barcelona "se corre demasiado".