La DGT ha recomendado abrochar todos los cinturones del coche por un motivo muy sencillo: es mucho más seguro viajar así, pero ¿por qué?
En verano los maleteros de los vehículos suelen ir cargados de cosas, ya sean maletas porque se va de viaje, cosas para la playa, ... En caso de que se produzca un choque los elementos del maletero pueden llegar a entrar en el habitáculo, porque la fuerza que ejercen esos objetos se multiplica de tal modo que los asientos podrían no ser suficiente para retenerlos.
En caso de accidente los objetos se vuelven mucho más peligrosos porque multiplican su peso (yendo a 50 kilómetros por hora se multiplica por 50 su peso) por ello se pueden convertir en elementos peligrosos que pueden hacer de un choque una situación mucho más grave, pero en caso de tener los cinturones de detrás abrochados las probabilidades de que los elementos del maletero entren en el habitáculo son mucho más pequeñas, por lo que es más seguro viajar de este modo.
Por ello, la DGT aconseja que abroches los cinturones de las plazas traseras aunque no haya nadie.
También es importante antes de un viaje en coche revisar que todo en el coche funcione de manera correcta, porque con el calor es más fácil que ocurran algunas averías, y de ese modo evitar posibles problemas durante el trayecto, además de viajar de una forma más segura.