Los datos de agosto son mejores que los de julio, mes en el que entró en vigor la nueva normativa y en el que se redujo ya un 5,5% la mortalidad comparada con el mismo periodo del año anterior.
En nuestro país, el director de la DGT, Pere Navarro, ya ha mostrado su intención de reducir la velocidad en las carreteras convencionales, donde se producen el 77 % de los fallecidos por accidentes de tráfico.
El informe del Observatorio francés asegura que en agosto se contabilizaron un total de 251 de muertes mientras que en el mismo mes del año pasado se produjeron 297 fallecimientos en las carreteras.
Al descenso de la mortalidad se suma la bajada de accidentes con daños personales, 136 menos con respecto al 2017 (3,2%), y de heridos hospitalizados, 128 menos (2,1 %).
El dato de este mes mejora la tendencia mostrada durante el segundo trimestre de 2018, que ya mantenía una dinámica decreciente de muertes por accidente de tráfico con una bajada del 6,3 % con respecto al mismo periodo de 2017.
El 1 de julio de este año entró en vigor la controvertida norma aprobada por el Gobierno francés que limita la velocidad en carreteras secundarias a 80 km/h, lo que afecta al 40 % de la red de rutas viales galas.