En octubre de 1973, cuando Egipto y Siria atacaban a Israel, durante la Guerra del Yom Kipur.

La OPEP decide castigar sin petróleo a occidente. Los efectos del embargo son inmediatos en todo el mundo. En nuestro país, el precio de la gasolina subió en un solo día tres pesetas y pasa a costar algo más de 17 pesetas, un superprecio para la época.

Así, pues, España, por primera vez en su historia, comienza en 1974 a aplicar un límite de velocidad de 130 kilómetros por hora en autopista.

Hay que esperar a 1976 para que los estragos de otra crisis energética llevara el Gobierno español a reducir el límite máximo de velocidad hasta los 100 km/h, nuestro récord histórico.

En los setenta también se prohibió también a los automóviles de los organismos públicos superar los 90 kilómetros por hora.