Durante su mandato, cuando era presidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero, la DGT implantó el carnet de conducir por puntos, una medida impulsada por el propio Pere Navarro.

El cambio supuso una reducción considerable del número de muertos en carretera. En concreto, su política de seguridad vial permitió reducir la cifra de fallecidos por accidente de tráfico en 2011 por primera vez en 50 años de los 1.500 fallecidos.

En su anterior etapa, el número de muertos en accidentes de tráfico disminuyó un 55 por ciento, desde las 5.517 víctimas mortales de 2001 hasta los 2.478 fallecidos de 2010.

Esta mejora llevó a España de estar a la cola en el ranking de países de la Unión Europea con menos accidentes a colocarse en el cuarto puesto de la lista de estados en donde más se mejora la seguridad en las carreteras.

Entre las medidas impulsadas por Navarro, se cuentan la creación de la Comisión de Seguridad Vial en el Congreso de los Diputados, la limitación a 90 kilómetros por hora en carreteras convencionales o la reducción a 110 kilómetros por hora en autopistas para "ahorrar combustible".

En su vuelta a la DGT, Navarro encuentra como principal reto la reducción de la cifra de muertos por accidentes de tráfico: tras más de una década de caídas, en 2016 el número volvió a crecer y aún no ha disminuido de nuevo.

En la actualidad, Navarro es vocal del patronato de la Fundación PONS que se dedica a la sensibilización en materia de seguridad vial, el progreso social de la innovación empresarial, la investigación en I+D+i o la divulgación y defensa de la Propiedad Industrial e Intelectual.