Entre enero y julio, la matriculación de vehículos electrificados (puros eléctricos e híbridos enchufables, incluidos turismos, dos ruedas, comerciales e industriales) ascendió a 79.145, el 39,2 % más que en los siete primeros meses de 2022.
Se vendieron 10.830 unidades solo en julio, es decir, el 39,4 % más, según datos de laAsociación Empresarial para el Desarrollo e Impulso de la Movilidad Eléctrica (Aedive) y de la Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos (Ganvam).
Las ventas de electrificados únicamente en turismos, repuntaron hasta julio el 49 %, con 65.946 matriculaciones, que suponen el 10,7 % del mercado total. En el conjunto de turismos, comerciales e industriales, la cuota fue del 9,8 %, según la misma fuente.
Gasolina y diésel ganan 16 a 1
Por su parte, la venta de vehículos de gasolina subió el 21 %, hasta las 212.356 unidades, y la de los de diésel el 5,78 %, hasta las 158.345 unidades.
Entre enero y julio los híbridos no enchufables (aquellos vehículos que durante la práctica totalidad del tiempo circulan tirando del motor de combustión), sumaron 137.941 matriculaciones, con un crecimiento interanual de casi el 31 %.
Lo que supone que por cada vehículo 100% eléctrico, se vendieron 16 unidades de aquellos que para circular utilizan durante todo el trayecto o en parte combustibles fósiles, que siguen así ganando por goleada al resto de alternativas.
Y es que aunque crece mes a mes, el mercado electrificado español está todavía muy por debajo del ritmo y volumen necesario para cumplir con los hitos mínimos de ventas.
De este modo, en los primeros siete meses se tendrían que haber matriculado 110.000 unidades para alcanzar el objetivo de 190.000 ventas en 2023, aseguran los fabricantes.
Desde Aedive y Ganvam consideran insuficiente el ritmo de ventas de electrificados para cumplir con los objetivos marcados en el borrador del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima 2023-2030, que fija en 5,5 millones el objetivo de vehículos electrificados para 2030.
Esta ambición debe ir acompañada de medidas eficaces si se quiere alcanzar, han subrayado ambas asociaciones, que señalan también la necesidad de alcanzar un Gobierno estable cuanto antes para no paralizar la estrategia de descarbonización.
Esta estrategia, debería apoyarse en ayudas directas a la compra y en incentivos fiscales que hagan más atractiva la adquisición de un vehículo electrificado, así como en agilizar el despliegue de la infraestructura de recarga.
