La nueva clasificación podría cambiar las reglas en Europa, según explica Transport & Enviroment (T&E), pues obligaría a los fondos de inversión a revelar en qué medida son 'verdes' según los nuevos criterios de la UE.
Esta taxonomía emite un fuerte mensaje a la industria automovilística: "no hay futuro para los motores de combustión".
Sin embargo, dicha lista deja la puerta abierta a los camiones y a los barcos de combustible fósil, si demuestran que usan biocombustible o biogás.
No obstante, la Comisión Europea será la que proponga la lista final de lo considerado como inversión 'verde'. En este sentido, la propuesta debe garantizar el acuerdo del Parlamento de la UE y de los gobiernos antes de final de año para convertirse en ley.
El subdirector de conservación de la naturaleza de la ONG Deutsche Umwelthilfe (DUH), Peer Cyriacks, ha señalado que los biocombustibles no son la solución a la crisis climática sino una amenaza para el clima y para la biodiversidad.