En este innovador estudio han participad 128 personas con una edad aproximada de 76 años , sin demencia, aunque considerados con alto riesgo de desarrollar Alzheimer por tener problemas de memoria.

Así, se realizaron distintos escáners de tomografía por emisión de positrones de los cerebros de los participantes para medir las placas amiloides en el cerebro.

Estas placas consisten en depósitos densos de una proteína llamada beta amiloide y su acumulación progresiva en el cerebro se ha asociado con el desarrollo de la enfermedad de Alzheimer. De los participantes, el 48% presentaba un nivel de amiloide a menudo asociado con la demencia.

Durante este estudio también se evaluaron las habilidades de pensamiento y de memoria de los participantes y lo bien que podían completar las actividades cotidianas, resultando que un total del 46% presentaban deterioro cognitivo leve, que puede ser un precursor de la demencia que se produce en la enfermedad de Alzheimer.

En cuanto la velocidad al caminar se midió con una prueba estándar para cronometrar lo rápido que las personas podían caminar una distancia de unos 13 pies (unos cuatro metros) a su ritmo habitual. La velocidad media a pie fue de 3,48 pies (poco más de un metro) por segundo y todos menos dos de los participantes estaban dentro del rango normal de velocidad al andar.