Según los científicos, el Sol empieza a aumentar su actividad ya que está entrando en un ciclo de acción y de tormentas, lo que tendrá sus consecuencias aunque no hay que ser apocalípticos. Habrá, por ejemplo, más fallos en las redes eléctricas.

La energía liberada por una erupción solar puede afectar a la Tierra, concretamente a las telecomunicaciones. Pueden provocar fallos en GPS, satélites, móviles y redes eléctricas completas.

Su periodo de máxima actividad se espera para finales de 2013, Aunque los científicos entienden los fundamentos básicos del proceso los detalles están todavía lejos.