Muchos de los ríos españoles están contaminados debido a diferentes factores que perjudican al medio ambiente. 

Río Gállegos
La actividad de la fábrica que estuvo vertiendo lindano en el Río Gállegos cesó en 1994, pero la acumulación de detritus contaminante todavía, continúa, hasta el día de hoy. 

Se estima que 4.000 toneladas de sustancias tóxicas continúan en los dos vertederos. Además de este producto, se han encontrado en este río, altos niveles de mercurio muy por encima de los permitidos, 20 microgramos.

Río Guadiana
Muchos de los embalses de este río extremeño se han transformado en 'pozos negros', gracias a la acumulación de nitratos, amonios y fosfatos, todas ellas sustancias tóxicas y sub productos de la fabricación de pesticidas y fertilizantes, que se han ido acumulando tras su vertido.

Aparentemente hay un mayor control respecto a lo que se vuelca en el río, pero hace falta mucho más que eso para recuperar las aguas y el Medio Ambiente, de los niveles de contaminación que padecen.

Río Llobregat
Este río catalán sufre una marcada escasez de agua por culpa de las minicentrales, pero además, su nivel de salinidad es muy alto a causa de los depósitos de las Minas del Bages y también se ha detectado una grave contaminación de restos de medicamentos.

Río Barbaña
Es depositario de las materias de desecho y fecales de los barrios aledaños a la corriente acuática en la ciudad de Orense, lo que lo ha transformado en un vertedero por sí mismo. Cada vez que llueve surgen sobre su superficie una serie de fluidos espumosos, que han sido calificados de "alarmantes pero no nocivos", por las autoridades pertinentes pertenecientes al Consello de la ciudad.

Río Cinca
El nivel de mercurio que se encuentra en los ríos se suele medir por medio del contenido en la llamada 'biota”, en este caso en los peces que viven en él y específicamente en los pasos de esta corriente por los pueblos de Villanueva de Gállegos y por Monzón, se ha determinado que son alarmantes.

Durante muchos años el cauce del río ha sido usado como vertedero por varias industrias. En 2004 Greenpeace denunció, presentando para ello muestras del lodo del canal de desagüe, que una industria vertía DDT, un insecticida cuyo uso, producción y comercialización están terminantemente prohibidos en todo el mundo.

Río Urumea
Los vecinos de Goizueta fueron los primeros en advertir el cambio en las aguas de este río que discurre por Navarra y el País Vasco, al notarlas oscuras y con olor a plomo. Los análisis demuestran altos niveles en las concentraciones de metales pesados y nocivos, como el Plomo.

Río Tinto
El río Tinto de Huelva, hace tiempo que perdió la cristalinidad de sus aguas y esto se debe a la actividad minera que ha volcado todo tipo de detritus en sus aguas. Hace más de 40 años que se vierten fosfoyesos en las marismas y según Greenpeace los lodos contienen elementos radiactivos.