El número cada vez más reducido de ejemplares vivos de urogallo en Europa ha llevado a la petición de modificar la categoría de esta especie de ‘vulnerable’ a ‘en peligro de extinción.

Las poblaciones de urogallos tan solo habrían comenzado a descender de manera significativa en algunas zonas de la región europea, como pueda ser el Pirineo aragonés. Por otro lado, los números de esta ave continúan siendo estables en regiones como Eurasia.

Como valoran los científicos, a raíz del último estudio poblacional del urogallo en nuestro país, que recopila distintos análisis entre los años 200 y 2017, la cifra de urogallos vivos estaría descendiendo por debajo de los 1500 ejemplares.

La explicación para este descenso en las poblaciones de urogallos se encontraría en las dificultades reproductivas a las que se enfrenta esta especie, y que en la actualidad supone una reducción del 58% de la presencia de estas aves en áreas típicas de exhibición, donde el macho intenta atraer a la hembra.

Además, otro de los factores responsables de la disminución de urogallos en España vendría motivado por los cambios en las temperaturas, como consecuencia de los efectos del cambio climático. Así, estas aves estarían abandonando zonas localizadas en altitudes más bajas y en orientaciones más expuestas, como consecuencia del empeoramiento de la calidad de su hábitat.

Por ello, los investigadores consideran esenciales los conteos que se realizan sobre las poblaciones activas de esta y otras especies amenazadas. Del mismo modo, reclaman que la categoría del urogallo pase a considerarse como especie en peligro de extinción. De esta manera se desarrollarían medidas de gestión más ambiciosas para la protección efectiva de la especie en España.