La reserva hídrica en España se encuentra actualmente en el 34,6 % de su capacidad total y encadena cuatro meses descendiendo, lo que la sitúa un 27,8 % por debajo de la media de los últimos 10 años, en 19.368 hectómetros cúbicos (hm3).

Según datos del Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico, la pasada semana el agua acumulada en los embalses españoles bajó en 407 hm3 (0,7 % de la capacidad total) y continúa la tendencia a la baja que arrastra desde mediados de junio.

Esto datos se producen a pesar de que, los últimos días, las precipitaciones han afectado considerablemente a la vertiente Atlántica y en menor medida a la vertiente Mediterránea, registrándose la máxima en Barcelona, con 51,6 litros por metro cuadrado.

Sin embargo, la misma semana de 2022, los embalses se encontraban al 31,40 % de su capacidad, con una reserva de 17.599 hm3, por lo que en la actualidad acumulan un 10% más agua que hace un año.

El nivel de las cuencas del norte peninsular que se mantenía por encima del 80 % de su capacidad hace una semana, ha descendido y tanto la del Cantábrico Oriental como la occidental, así como la del País Vasco se encuentran por debajo de ese límite, con el 78,1 %, el 70,4 % y el 66,7 %, respectivamente.

El descenso afecta sobre todo a las cuencas del sur peninsular, entre ellas: Guadalete-Barbate (15,1 %); Guadalquivir (17,9 %) y la Mediterránea andaluza (22,5 %), mientras las cuencas internas de Cataluña siguen en niveles muy bajos acumulando tan solo el 20,7 % de su capacidad.

El siguiente cuadro detalla el estado de las cuencas, su capacidad y la situación actual: