Miembros de la Unidad Militar de Emergencias (UME), junto con la Guardia Civil y Salvamento Marítimo, durante estos días, están trasladando las tres estructuras de hormigón desde el puerto de Valencia, donde llevan varios meses sumergidas, hasta su localización definitiva a unos 180 metros de la costa y unos 4 metros de profundidad. 

Según el comandante jefe Barrachina de la UME, para el reflote y traslado de los bloques se están utilizando balizas, grandes globos de aire, que elevan las piezas desde el fondo, una tarea que se prolonga durante unas dos horas. Barrachina ha explicado que las 20 toneladas de cada pieza están listas para ser trasladadas cuando las balizas salen del agua, y que se tarda otra hora más en hundir las estructuras de hormigón en la ubicación final. 

El catedrático de puertos y costas de la Universidad Politécnica de Valencia (UPV), José Serra Peris, colaborador del proyecto, ha explicado que el arrecife artificial "abrigará" la playa y reducirá la pérdida de arena, lo que lo convierte en "un modelo que se puede aplicar a playas" para favorecer su mantenimiento y sostenibilidad. Serra ha especificado que la función protectora del arrecife, que cubrirá un frente de unos 90 metros, podrá confirmarse "con el tiempo" porque "no todos los temporales son iguales ni vienen de la misma dirección ni con la misma energía", aunque sí podrá verse dentro de un año la respuesta de los peces hacia las estructuras. 

El alcalde en funciones de Valencia, Cristóbal Grau, ha explicado que la idea del proyecto, promovido por la Fundación Deportiva Municipal, surgió hace dos años con vistas deportivas, y que el área de deportes del consistorio ha invertido 25.000 euros en 'Arrecifes Valencia'. 

40 países del mundo ya cuentan con arrecifes artificiales y en España hay en Tenerife, Barcelona y Cartagena pero ninguno de ellos cuenta con fines medioambientales como este, Así. el de Valencia se convertirá en el primero con fines medioambentales.