Una furgoneta de reparto alcanzó a Alfredo cuando cruzaba un paso de peatonesy lo mandó contra un árbol. Tras el golpe, perdió el conocimiento, fue operado y ahora está rehabilitándose en el hospital. Alfredo siempre ha hecho deporte y considera que ha sido muy importante para su rehabilitación, desde su paso por el fútbol y el culturismo hasta ser aspirante a bombero. “Un peatón no puede cruzar por donde le dé la gana, pero también el conductor tiene que ir más flojo”.

Alfredo necesita reorganizar su vida y ayuda para pagar los meses de piso que le quiere cobrar su antiguo casero (meses que ha pasado ingresado) para poder sacar sus cosas de esa casa.

Anastasio se dirigía a su trabajo como cualquier otro día cuando en un despiste no se dio cuenta de que el semáforo estaba en rojo y colisionó contra el coche de delante. Aunque iba a 20 km/h, Tasio no llevaba puesto el cinturón y esto provocó que su golpe fuera mayor, no pudiera moverse durante un tiempo y solo gesticulase con la boca. Tras varias operaciones y mucho esfuerzo, consigue progresar día a día, su consejo es que “antes de poner el contacto, va el cinturón. Yo no lo tenía, y mira qué me pasó”. Anastasio tiene la ilusión de volver a su taller, aunque no sea como mecánico, a gestionar a sus empleados y llevar la logística.