El 70% de las víctimas mortales en siniestros viales se han registrado en carreteras. En concreto, la Dirección General de Tráfico (DGT) ha informado que un total de 975 conductores han muerto en vías convencionales en 2020.

El 90 por ciento de estos sucesos mortales se han derivado de de errores humanos evitables. La DGT apunta a cinco infracciones muy habituales, que ordena en un listado, según las víctimas mortales que dejen. Además, recuerda normas y recomendaciones para evitarlas:

1. Excesos de velocidad. La más frecuente con 4.440 siniestros ocasionados, que suelen ser graves o muy lesivos en un solo vehículo por curvas, invasiones de carriles o salidas de vía hacia la derecha y/o izquierda. Deben respetarse siempre los límites de velocidad y adaptarlos a cada situación (tráfico denso, asfalto en mal estado, mal tiempo, etc.).

2. Distancia de seguridad insuficiente. Provoca 3.573 accidentes con víctimas, sobre todo en vías interurbanas con mucho tráfico (autovías). No cumplir con la distancia, recomendada de 100 metros, origina especialmente colisiones y atropellos. Es muy aconsejable que esta separación aumente a mayor velocidad de circulación, con el asfalto mojado, con retenciones intermitentes...

La iniciativa veraniega 'Ve, vuelve y vive' de STOP accidentes arranca para concienciar sobre la siniestralidad vial
La iniciativa veraniega 'Ve, vuelve y vive' de STOP accidentes arranca para concienciar sobre la siniestralidad vial | Pexels

3. No respetar las señales de prioridad. Saltarse un stop, con especial atención a tramos de carretera con intersecciones, da lugar a colisiones o lesiones graves para la persona que ocupa el lado del impacto. Ya se han producido un total de 3.188 siniestros. Por ello, hay que detenerse siempre y observar si debe cederse el paso. Solo después de esto, y cuando no vengan más vehículos, se reanudará la marcha.

4. Invadir el sentido contrario. Las invasiones de carril han causado 1.342 accidentes, muy característicos en carreteras convencionales. Para evitar colisiones frontales, motivadas en buena parte por excesos de velocidad; consumo de alcohol y/o drogas; distracciones o cansancio, se exige mantener la concentración en todo momento, parar para descansar si así se requiere y alejarse de dispositivos como el teléfono móvil.

5. Adelantamientos ilegales. Si adelantamos en lugares prohibidos -incluidos ciclistas-, a velocidades inadecuadas y sin distancia de seguridad, el riesgo de colisión frontal se multiplica. De hecho, en la actualidad se han producido 431 siniestros de este tipo. Para evitarlo, se sugiere adelantar siempre con cuidado controlando la velocidad y los espacios, y manteniendo las distancias frontal y lateral de seguridad.