A medida que bajan las temperaturas el arranque del motor del coche demanda más energía y la batería del vehículo, que debe estar en perfecto estado para suministrarla. Teniendo en cuenta que las altas temperaturas del verano degradan este componente y en invierno el frío también puede afectar a su rendimiento, te recordamos cuál debe ser el adecuado mantenimiento de la batería y cuándo debes cambiarla.
Los expertos recomiendan revisar la batería antes y después del verano y del invierno, precisamente tras de los cambios de temperaturas más marcados.
Pero, teniendo en cuenta que los españoles gastamos cuatro veces más en bares y restaurantes que en el mantenimiento del coche (572,2 euros de media en 2021) y que apuramos al máximo la vida útil de algunos elementos del vehículo, vamos a dar una recomendación algo más realista.
Si tu coche tiene más de dos años, cosa muy factible dado que la media de edad del parque automovilístico español está en 13,5 años, ya te avanzamos que deberías revisar la batería cada seis meses, sin olvidar echar un vistazo al sistema de carga (alternador).
Para evitar que el coche un día te deje tirado o no te arranque en caso de necesidad, la recomendación más segura es acudir a un taller y medir la carga con un voltímetro. Allí mismo te informarán si es preciso sustituirla.
Si te toca cambiarla puede resultar más o menos sencillo en función del coche que tengas, dado que los vehículos cada vez tienen más componentes tecnológicos.
Por eso, es aconsejable acudir a un taller especializado que cuente con los medios adecuados para hacerlo sin producir daños a la electrónica de tu vehículo y así dejar correctamente reprogramados los sistemas de gestión de energía que precisan algunos modelos.
Además, en caso de tener que cambiarla los establecimientos se encargan de su correcto reciclaje, dado que hay que recordar que las baterías son altamente contaminantes.
Si finalmente eres tú mismo quien decide cambiarla, antes de depositar la vieja en los puntos habilitados, deberás fijarte en la pegatina que describe sus características para asegurarte que la nueva cumple con iguales requisitos.
Normalmente en esa pegatina figuran la tensión (V), la intensidad de entrega (ah), la intensidad de arranque en frío (A) y las dimensiones.
Por lo general, las baterías están ubicadas en el motor, aunque también pueden encontrase debajo del asiento trasero o incluso en el maletero.
¿Cuándo se debe cambiar la batería?
La vida útil de una batería está en 4 años de media, aunque puede deteriorarse más rápido por varias razones como su exposición a las altas temperaturas o al uso que se haga del coche, entre otras. Pero a partir de los 4 años puede comenzar a dar problemas y si la batería tiene más de 5 años lo aconsejable es cambiarla.
A continuación repasamos algunas señales indicativas de que deberías cambiarla.
- Cuando se enciende en el cuadro de mandos el aviso de la batería, aunque sea de forma intermitente.
- Si el coche no arranca a la inmediatamente o tarda en hacerlo.
- Cuando al arrancar el vehículo se oyen como chasquidos.
- Si la batería no se recarga tras haber circulado con el vehículo
- Cuando la batería presenta corrosión o está deformada.
- Si tiene más de cuatro años, aunque influye mucho el tipo de uso.
- Cuando hace más de dos años que no se revisa en un taller.
- Si el coche lleva tiempo parado o se ha usado muy poco en un largo espacio de tiempo.
- Cuando usas el vehículo a menudo, pero en trayectos cortos.
- Si continúa funcionando el motor en los semáforos a pesar de estar activado el modo start&stop.
- Cuando el coche posee abundancia de equipamiento tecnológico o usas muchos dispositivos eléctricos adicionales.
- Si el coche ha estado expuesto a altas temperaturas durante el verano.
- Y , por último, cuando hay pronóstico de ola de frío o se piensa viajar a una zona con bajas temperaturas diarias.