La 'Guía de Bolsillo', elaborada por la Asociación de Constructores Europeos de Automóviles (ACEA), señala que en los últimos tres años las emisiones medias de los coches europeas han registrado un repunte, a pesar de la disminución iniciada durante la última década. La penalización del diésel en favor de la gasolina podría ser una de las causas que expliquen este aumento.

No obstante, hay grandes diferencias en los niveles de gases de los turismos en los Estados miembros de la UE. Así, por ejemplo, los Países Bajos son la región con una media de emisiones más baja, con 98,4 gramos de CO2 por kilómetro recorrido, seguidos de Malta y Portugal, con unas emisiones medias de 105,3 y 109,4 gramos respectivamente.

Por su parte, España se sitúa por debajo de la media europea, con 121,3 gramos de CO2 por kilómetro recorrido, aunque ha aumentado este dato un 2,7% en comparación con 2018.

Bulgaria y Eslovaquia son los países europeos con una media de emisiones de sus vehículos más elevada , con 137,6 gramos y 133,4 gramos, respectivamente.

El documento también destaca que el número de turismos más contaminantes ha aumentado en el último año. De hecho, más del 30% de los coches vendidos en Europa en 2019 emitió más de 130 gramos de dióxido de carbono por kilómetro recorrido.

Sin embargo, las emisiones de los coches nuevos acumulan una caída del 20% en comparación con 2008.