"Una mejor educación y formación tienen un impacto positivo en la seguridad vial. Por eso, estamos proponiendo mejorar la formación de los conductores profesionales", ha justificado la comisaria de Transporte, Violeta Bulc, que ha admitido que "se necesita un nuevo empuje fresco para alcanzar el objetivo estratégico de Europa de reducir a la mitad del número de muertes en la carretera en 2020".
Las novedades principales de la propuesta incluyen la actualización de la formación para mejorar la protección de los pasajeros más vulnerables y optimizar el consumo de combustible, ha informado el Ejecutivo comunitario.
La propuesta, que deberá recibir el visto bueno de los Veintiocho y de la Eurocámara para entrar en vigor, también busca mejorar el reconocimiento de las cualificaciones y la formación de los conductores obtenida en un Estado miembro a fin de contribuir también a su movilidad.