Entre el 6 y el 13 de marzo, los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil, además de los de las policías locales y autonómicas que se sumaron a la campaña, llevaron a cabo un dispositivo especial de vigilancia y control, tanto en vías urbanas como interurbanas, sobre el uso del cinturón de seguridad y de los sistemas de retención infantil.
En estos siete días se han controlado un total de 399.192 vehículos entre turismos, taxis, vehículos de mercancías y autobuses, a los que se han formulado 5.405 denuncias a conductores y pasajeros por no hacer uso del reglamentario sistema de retención.
El 76% de todas las denuncias fueron puestas en carreteras convencionales, un hecho preocupante si tenemos en cuenta que estas vías siguen siendo las más peligrosas al ser donde mayor número de víctimas mortales se registran y donde conviene, aún más, extremar las precauciones.
Un total de 5.089 adultos han sido sancionados por no utilizar el cinturón de seguridad, una cifra que se ha visto incrementada con respecto a la anterior edición de esta campaña y que supone que 2.871 conductores, 1.122 pasajeros de los asientos delanteros y 1.096 de los traseros no viajaban debidamente protegidos en sus vehículos en caso de haber sufrido un siniestro de tráfico.
Está demostrado que el cinturón de seguridad, además de reducir en un 50% el riesgo de fallecer en un siniestro de tráfico, protege de salir despedido del habitáculo, así como de impactar contra el parabrisas. En casco urbano, la posibilidad de resultar herido grave o muerto es 5 veces menor si se lleva puesto el cinturón de seguridad.
En cuanto a lossistemas de retención infantil, obligatorios para menores con una altura igual o inferior a los 135 cm, los agentes detectaron a 316 que viajaban sin hacer uso de este dispositivo de seguridad o que lo hacía de manera incorrecta, 249 en los asientos traseros y 67 en los delanteros.
En el caso de los menores, la utilización de los sistemas de retención infantil es aún más importante ya que los datos demuestran que nueve de cada diez lesiones infantiles graves o mortales se habrían evitado si se hubieran utilizado los sistemas de retención obligatorios. Además, en caso de sufrir un siniestro de tráfico, las lesiones se reducen hasta en un 75% con un uso adecuado de los mismos.
Para intentar evitar este tipo de comportamientos, la Ley de Tráfico y Seguridad Vial elevó en 2022 a 4 los puntos que se pierden por no utilizar el sistema de retención infantil adecuado o no hacerlo de la manera correcta, del mismo modo que se hizo con el no uso del cinturón de seguridad.