Estas son las líneas estratégicas en las que trabaja laAsociación Española contra el Cáncer (AECC) para contribuir en la investigación en cáncer.

¿Cuál es la situación de la investigación contra el cáncer en España?

España sigue teniendo la menor inversión en I+D del panel de países analizados: el gasto en I+D en España es diez veces menor que en Países Bajos y ocho veces menor que en Alemania. No obstante, la inversión específica en investigación en cáncer ha sufrido un aumento en los últimos años.

Las entidades filantrópicas han aumentado considerablemente su apoyo al sistema español, triplicando el valor de su inversión entre 2015 y 2020, además de haber extendido o incluido en sus acciones apoyo directo a la transferencia de conocimiento.

Nuestro país se ha consolidado como uno de los más competitivos en atracción de fondos europeos en el ámbito del cáncer, demostrando gran capacidad de liderazgo en el programa H2020.

España sostiene su posición en el Top 10 de países que más publican en cáncer, además de un creciente nivel de especialización (desde 2016, el 4% de toda la investigación en España está relacionada con el cáncer).

El sistema sanitario español sigue creciendo activamente en investigación clínica, aunque el crecimiento ha sido más substancial entre 2010 y 2016.

España presenta una clara prevalencia de ensayos de patrocinio privado (y su influencia en el tipo de intervención y fases); asimismo, y directamente relacionado con el desarrollo del sistema español en la última década, su prevalencia empieza a disminuir y hay una tendencia a la diversificación del tipo de intervenciones y a fases más iniciales.

1 de cada 2 personas tendrá cáncer a lo largo de su vida: salvarte no será una cuestión de suerte

¿Qué consigue la investigación en cáncer?

Impulsar la investigación en cáncer hace posible dar respuesta a los grandes retos de esta enfermedad en España y eso se consigue apoyando a los investigadores que hoy lideran la investigación, tanto dentro como fuera de nuestras fronteras.

Cada día se producen avances que nos acercan más a encontrar una respuesta contra la enfermedad. El apoyo a los investigadores hace posible que la investigación en cáncer produzca más de un resultado diario.

Para alcanzar el objetivo del 70% de supervivencia en 2030 se necesita reforzar la investigación en cáncer y garantizar que su inversión realmente se traduce en cubrir las necesidades de los pacientes.

Por eso, se pone en marcha el reto de conseguir este 70% de supervivencia en 2030, porque a través de él se quiere incidir en los tipos de cáncer de supervivencia baja o estancada, pero que cuentan con una incidencia poblacional significativa. Estos son los de esófago, estómago, hígado, páncreas o pulmón. De esta forma, se provocará un impacto real y significativo en la supervivencia global del cáncer.

Sin embargo, todavía queda mucho recorrido para alcanzar el 70% de supervivencia y solo a través de la investigación en cáncer podremos conseguir que la calidad de vida de los pacientes mejore y acabar con las desigualdades.