La propagación de las células de cáncer de una parte a otra del cuerpo, proceso conocido como metástasis, es la causa principal de muerte entre los pacientes con cáncer. 

Los resultados de este trabajo indican que las células de cáncer de mama se sideminan a otras partes del cuerpo deslizándose alrededor de otras células que bloquean su ruta de escape fuera del tumor original. 

"Demostramos una regla cuantitativa para medir la capacidad de una célula de deslizarse", dice el autor principal del estudio, Anand Asthagiri, de la Universidad Northeastern, en Boston, Estados Unidos.

"Al poner números a este comportamiento celular, no sólo podemos discernir qué vías regulan el escape, sino también la cantidad. Esto abre la puerta a la búsqueda de los motores de comportamiento y las estrategias de deslizamiento más poderosos para frenar este comportamiento invasivo", agrega este investigador.

Para invadir otros tejidos en el cuerpo, las células cancerosas migran a lo largo de fibras de proteína de colágeno que sirven como un camino para salir del tumor original. 

Sin embargo, estas fibras son muy estrechas y el microambiente está lleno de otras células, por lo que no ha estado claro cómo células cancerosas metastásicas superan los obstáculos y navegan con éxito por este entorno espacialmente limitado.

"Cada célula es de 10-15 micras de ancho y está encontrando una manera de moverse más allá de una vecina, también de 10-15 micras de ancho. Y lo hacen en una pista que es tan sólo de 5 micras de ancho", explica Asthagiri.

"Cómo se aprietan físicamente, se extienden y se envuelven alrededor es realmente notable y un fascinante problema biofísico. Estábamos muy interesados en clasificar la mecánica y regular cómo las células lo consiguen y por qué las células cancerosas son particularmente adeptas a ello".