La razón por la que es poco probable que Europa viva otra ola de contagios si no aparece una nueva variante es que la estrategia europea de lucha contra el coronavirus ha sido en estos dos años muy distinta a la que se ha seguido en el país asiático.

Ellos se han centrado en evitar la transmisión del virus e intentar cortar de raíz los contagios, para que no exista una transmisión comunitaria, lo que se llama 'estrategia cero covid'. Además, la vacuna china se ha demostrado que es una de las peores a efectos de parar los contagios y la enfermedad grave. Algo que también ha influido en este aspecto. Hasta que apareció la variante Omicrón, pudieron contener el virus.

La estrategia llevada a cabo en China puede servir de ejemplo de lo que nos hubiera pasado si hubiéramos aplicado las mismas herramientas en España. Aunque Europa sí tendría que preocuparse si aparece una nueva variante.

La inmunidad que han ido adquiriendo los europeos poco a poco con el paso de las diferentes variantes, frente al país asiático que ha decidido mantener esa estrategia de Covid cero, con confinamientos masivos al mínimo contagio detectado y un control exhaustivo de la población con test.

Por el contrario en ciudades como Hong Kong la gente se confió con la política cero y no se llegó a vacunar, y hace un mes y medio empezó a aumentar mucho mortalidad en las personas mayores que no estaban protegidas en este sentido.

Los expertos consideran que en España se debe tratar de hacer vida normal, pero concienciando a la población de cómo se transmite este virus, sabiendo que cuanto más circule más peligroso es. Por lo que hay que tener precaución y mantener la mascarilla en los sitios cerrados, y en abierto cuando estén muy concurridos.