Cameron es un niño de cinco años de Carolina del Norte (Estados Unidos) que se ha sometido a 15 operaciones para poder separar los dedos de la mano. Sin embargo, hubo algo que revolucionó su vida: las manos 3D.

Con la ayuda de su madre, han diseñado y fabricado 44 dispositivos en 3D a modo de prótesis y soportes. Gracias a estos diseños, que él mismo utiliza, otras personas que padecen su misma patología pueden sostener juguetes, utensilios o distintos objetos.

El pequeño incluso se atreve con los bocetos para crear nuevas manos mejoradas, según recoge 'Daily Mail'.

De esta forma, Cameron ha logrado superar mejor su condición y ayudar a otros niños con problemas similares.