Rocío recoge firmas para que se obligue a colegios y restaurantes a tener estos autoinyectores en sus botiquines. En España, una de cada diez personas sufre una alergia sin saberlo, por lo que el shock Anafiláctico les pilla por sorpresa. Medicamentos, veneno de insectos, el pelo de algunos animales, el latex y algunos alimentos lo provocan.

En el 66 % de los casos se sufre fuera de casa, un 18 % en los colegios. El niño no se lo puede administrar, pero un profesor formado y entrenado en el manejo de las reacciones anafilácticas podría administrar la adrenalina.

Seis de cada diez profesores no sabría reconocerlo y el 90 % no podría utilizar un autoinyector. Solo en Baleares, la formación es obligatoria.

En el caso de los restaurantes nadie les previene de lo que puede ocurrir con un comensal alérgico. Pero en estos casos, cada minuto cuenta.