Carmen Posadas, ganadora del Premio Planeta en 1998 con su novela 'Pequeñas Infamias', nos fascinó en 2020 con su gran éxito 'La leyenda de la Peregrina', y lo ha vuelto a hacer este año con su última novela, 'Licencia para espiar'; la sorprendente y desconocida historia de las mujeres que, a lo largo y ancho del planeta, se han dedicado a las labores del espionaje. Mujeres, algunas anónimas, otras no tanto, que han formado parte de los complots más extraordinarios de la Historia.
La escritora tuvo un acercamiento poco común hacia el mundo del espionaje, ya que su padre fue nombrado embajador de Uruguay en Moscú y desde muy niña vio cómo el personal que trabajaba en su casa espiaba a su familia a través de las paredes de sus dormitorios. Un espionaje de andar por casa, con material algo defectuoso que fallaba muy a menudo, lo que hacía de la situación algo absurdo y hasta cómico, como en una mala película de espías.
Posadas, fascinada por este mundo, decidió elaborar una novela que recogiese la historia del espionaje desde el punto de vista de las mujeres espías, de las que la información es muy escasa. La escritora reconoce que de dichas mujeres, al desarrollar su trabajo de una manera tan profesional, casi no se ha podido recabar información, y sus historias han caído en el olvido.
Su personaje histórico favorito ha sido, sin duda, el Caballero de Eon, del cual siempre se ha desconocido su verdadero género, y del que dicen que logró seducir a Casanova, famoso agente secreto del siglo XVIII, y cuyas acciones cambiaron el transcurso de la Historia para el Imperio Francés.
Carmen reconoce, entre risas, que la considerada mejor espía de la historia y de la cual habla en su libro, fue en realidad una pésima espía a la que las cosas no parecían salirle muy bien, y compara su figura con otras mucho más desconocidas que hacían su labor de una forma más discreta, como las comedoras de veneno de la India.
La novela, que ha requerido de un proceso de documentación extremadamente laborioso, abarca la historia del espionaje femenino desde sus albores hasta nuestros días, con numerosos ejemplos en cada época, que no solo cuentan una historia sino que nos sitúan en el contexto de la misma, haciendo que el lector se sumerja entre las páginas de un libro lleno de secretos.