El escritor Javier Cercas presenta su último libro, 'El castillo de Barbazul', con el que cierra la trilogía de su serie 'Terra Alta'. La trilogía, compuesta por los volúmenes 'Terra Alta',galardonada con el Premio Planeta en 2019, 'Independencia' y ahora, 'El castillo de Barbazul', toman como principal protagonista a Melchor Marín, un joven que en 'Terra Alta' comienza ejerciendo de policía casado con la bibliotecaria del pueblo y es padre de una hija, Cosette.
Sin embargo, tras 'Independencia', Marin vuelve en esta última entrega enfrentándose a la peor pesadilla de cualquier padre, la desaparición de su hija, convertida ya en una adolescente de 17 años.
Javier Cercas confiesa que ya tenía en la cabeza un proyecto mayor por el que la aventura de Melchor Marín debía continuar: "En parte me había enamorado del personaje, y en parte el mundo que se había quedado en torno a él me lo exigía", confiesa.
La historia, que comienza cuando su hija Cosette descubre por casualidad que su padre le ha engañado acerca de la muerte de su madre, la desconcierta, la subleva y la lleva a irse de vacaciones (al mismo tiempo que celebra su fin de bachillerato) a Mallorca, un destino tradicional entre los viajes de jóvenes y escenario clave de la trama. Unas vacaciones con un billete de ida, pero sin uno de vuelta.
La pesadilla de Marín comienza cuando su hija no contesta ni a llamadas, ni a mensajes, por lo que decide ir a la isla en su búsqueda. 'El castillo de Barbazul’ se convierte así en una trepidante novela de aventuras, donde Melchor Marín descubrirá de lo que son capaces los seres humanos, rodeados en un mundo de violencia, mentiras, abusos de poder y cobardía.
Aunque también encontrará a gente capaz de jugárselo todo por una causa justa. Precisamente, así es Marín, un justiciero de los miserables y de los débiles que intenta protegerlos de los poderosos, convirtiéndose en uno de los temas fundamentales de esta novela.
Y es que, de Marín se ha dicho que era un "buen mal" policía, capaz de lo mejor pero también de lo peor. Según lo define el autor, se trata de "un ángel que a veces se convierte en un ángel exterminador".
'El castillo de Barbazul'' representa, una vez más, el fanatismo de Javier Cercas por la ficción, por todo aquello que no podría hacerse en la vida real: "En la ficción las cosas funcionan afortunadamente de manera distinta. La ficción está precisamente para sustituir a la vida, para hacer aquello que en la vida no podemos hacer", explica Cercas.