Esta iniciativa se puso en marcha en el año 2013 para ofrecer un espacio de reproducción segura a estas especies a las que el ser humano está dejando sin lugares donde anidar.

Un importante proyecto que incluía la instalación de más de 400 casetas-nido en sus plantas potabilizadoras, líneas eléctricas y embalses con el objetivo de que especies como murciélagos y rapaces hicieran allí sus nidos ante la dificultad de encontrar sitios adecuados.

Las aves rapaces y los murciélagos son claves para el control de plagas como el topillo, como demuestran las grabaciones de las cámaras instaladas para monitorizar las casetas, según las cuales "una pareja de lechuzas puede capturar 200 roedores durante el periodo reproductor", según ha afirmado la compañía.

Este proyecto se llevará a cabo también en otros países como México, donde ya han sido instaladas 40 en la estación depuradora de aguas residuales de Atotonilco, la mayor instalación de este tipo del mundo, que está actualmente en proceso de construcción. 

Los datos obtenidos a partir de esta iniciativa permitirán elaborar, en colaboración con la Universidad de Alcalá de Henares, una tesis doctoral que analizará los datos como la alimentación de las especies, el uso del hábitat o cómo seleccionan sus presas.