Una historia con final feliz que no empezó con buen pie para Hoshi, un american eskimo al que le fueron extirpados los globos oculares tras una complicada enfermedad. 

Seis meses antes de la operación, los dueños de Hoshi adoptaron a Zen y, desde el principio, los dos perritos congeniaron muy bien, según el programa americano 'Inside edition'.
Hoshi fue perdiendo la visión y Zen asumió la tarea de guiarle hasta el punto que se han convertido en inseperables y realizan numerosas actividades juntos. 

Su historia, un ejemplo de amistad y superación, cuenta con miles de seguidores en Instagram con el nombre por el que popularmente se le conocen: 'The fluffy duo', que quiere decir algo así como 'dúo achuchable' y algunos de sus vídeos ya acumulan más de 700.000 visitas.