España es el primer país europeo que acumula más hectáreas quemadas en lo que va de año, el segundo país es Rumanía pero muy por debajo de España, ya que allí han ardido 150.027 hectáreas, lo que significa 86.548 hectáreas menos que en nuestro país. El tercer puesto es para Portugal, donde se han quemado 61.202 hectáreas.

En cambio si atendemos al porcentaje calcinado respecto al tamaño de cada nación, el más afectado es Portugal, donde las llamas han devorado el 0,67 por ciento de su superficie (9,18 millones de hectáreas); seguido de Rumanía, con el 0,63 por ciento de su territorio afectado (23,83 millones de hectáreas); el tercer puesto lo ocupa España, con el 0,47 por ciento de los 50,60 millones de hectáreas de suelo nacional quemado.

Baile de cifras entre el Gobierno y Europa

No obstante hay que apuntar que el sistema de estadísticas del Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico, que se nutre de la información que le remiten las comunidades autónomas, sitúa en 162.447,44 hectáreas la superficie quemada en el conjunto de España en los siete primeros meses del año.

La diferencia en una semana sería de 74.127 hectáreas entre los datos europeos, que abarcan hasta el 6 de agosto, y los del Gobierno español. Sin embargo, el anterior balance, que llegaba hasta el 24 de julio apuntaba hasta esa fecha algo más de 135.000 hectáreas afectadas.

En todo caso, la cifra, 162.447,44 hectáreas sitúa al año 2022 como el peor año del decenio en materia de incendios, seguido por 2012, cuando en estos siete primeros meses del año se habían quemado 150.194 hectáreas, un 7,54 por ciento menos.

De las 162.447,44 hectáreas quemadas en los siete primeros meses del año, 76.776,59 hectáreas eran superficie arbolada y otras 75.490,68 hectáreas de superficie matorral y monte abierto. Las 10.180,17 hectáreas restantes eran de pastos y dehesas.

El noroeste del país el más afectado por el fuego

Respecto a la distribución geográfica, el 45,34 por ciento de los siniestros se registraron en el noroeste (Galicia, Asturias, Cantabria, León y Zamora), donde se ha quemado el 41,89 por ciento de la superficie arbolada total y el 37,82 por ciento de toda la superficie forestal quemada.

En segundo lugar por número de incendios se sitúan las comunidades interiores, donde se contabilizaron 37,15 por ciento de los siniestros. Allí se quemó el 41,65 por ciento de la superficie arbolada quemada en el conjunto del país y el 44,08 por ciento del total de la superficie forestal