Zuzu vivía feliz con su familia, pero un día murió su padre biológico y el animal comenzó a estar cada vez más triste, con mal humor y lloraba a todas horas. 

Un día se escapó de la casa, unos vecinos de la zona lo encontraron y decidieron llamar a la protectora de animales de Downey Animal Center de California, en Estados Unidos, que asumió que el animal había sido abandonado.

Un día, los voluntarios de la protectora se dieron cuenta que, al ver a unas personas, el perro estaba nervioso, alegre, feliz y que movía la cola sin parar. Fue entonces cuando empezaron a sospechar que, quizás, Zuzu conocía a esas personas.

No se equivocaban. Esas personas eran los  antiguos dueños del animal  pero no iban allí a recuperarlo, sino a adopotar una nueva mascota porque estaban cansados de los continuos lloros de Zuzu.

Una terrible historia que rápidamente se ha hecho popular el las redes sociales junto con el vídeo del momento del particular reencuentro.

Muchas personas han pedido a los repsonsables del refugio que no permita a esta familia adoptar a más animales pero, por el momento, se desconocen más detalles al respecto.

Por el momento, Zuzu continúa en el refugio y los voluntarios siguen luchando para que, muy pronto, el animal consiga un nuevo hogar con una familia que le quiera y cuide de verdad.