En estos momentos, según la información de que dispone la organización ecologista, el Banco Santander estaría considerando la posibilidad de financiar dicho proyecto nuclear.

El Gobierno indio planea que Jaitapur se convierta en la mayor central nuclear del mundo. La organización ecologista advierte al Banco Santander de que el proyecto implica riesgos similares a los que han conducido a la catástrofe de la central nuclear de Fukushima en Japón, por encontrarse en una región costera clasificada por las autoridades como una zona con alto riesgo de seísmos y donde también existe el peligro de inundaciones por tsunamis o por otros sucesos extremos. Estas circunstancias fueron ignoradas en la selección del emplazamiento.

Greenpeace recuerda además al Banco Santander que el proyecto ya está causando cuantiosos problemas sociales debido a que 1.000 familias perderán sus granjas y muchas más  sus zonas de pesca y su medio de vida.

En los últimos meses la oposición local al proyecto, que se ha manifestado pacíficamente durante los últimos cuatro años, ha crecido intensamente. Esta oposición ciudadana está siendo duramente reprimida: el pasado mes de abril una persona resultó muerta a manos de la policía y más de 1.500 personas han sido detenidas durante las protestas contra el proyecto.

“Por razones técnicas y económicas, invertir en energía nuclear mina la viabilidad de las energías renovables, por lo que es ahora necesario hacer una elección. La energía nuclear no es una solución al cambio climático. El riesgo inherente y el alto coste de las centrales nucleares puede ser evitado invirtiendo en un sistema energético eficiente, inteligente y 100% renovable”, ha declarado Carlos Bravo, responsable de la campaña de energía nuclear de Greenpeace.

Por todos estos motivos, Greenpeace considera que Jaitapur es un proyecto controvertido y peligroso y urge al Banco Santander a abandonar su interés en el mismo.