El hallazgo es el resultado de estudio en el que se ha simulado por primera vez la distribución futura de los lagos que se forman en la superficie de la capa con hielo derretido de nieve y hielo, llamados lagos supraglaciares.

En otros estudios ya se había demostrado que el impacto de los lagos, supraglaciares sobre la pérdida de hielo en Groenlandia, era pequeño, pero con esta nueva investigación se deja claro y demostrado que el flujo de la capa de hielo podría verse alterada de un modo dramático.

La doctora Amber Leeson, de la Escuela de la Tierra y del Medio Ambiente y miembro del equipo del Centro Polar de Observación y Modelización (CPOM), quién dirigió el estudio, explica: "Los lagos supraglacial pueden aumentar la velocidad a la que se funde la capa de hielo y los flujos, y nuestra investigación muestra que en 2060 se duplicará la superficie de Groenlandia cubierta por ellos".

Los lagos supraglaciares son más oscuros que el hielo, por lo que absorben más calor del Sol, lo que conduce a un aumento de la fusión. Cuando los lagos alcanzan un tamaño crítico, drenan a través de las fracturas de hielo, permitiendo que el agua llegue a la base de la capa de hielo que hace que se deslice con mayor rapidez en los océanos. Estos cambios también pueden dar lugar a una mayor fusión.

"Cuando se vierte la masa para tortitas en una sartén, si se lleva rápidamente hasta los bordes de la sartén, se consigue una tortita muy delgada. Es similar a lo que ocurre con las placas de hielo: cuanto más rápido fluyen, más delgadas serán", pone como ejemplo Leeson.

"Cuando la capa de hielo es más fina, se encuentra a una altura ligeramente inferior y a merced de las temperaturas del aire más cálidas de lo que hubiera sido si fuera más gruesa, aumentando el tamaño de la zona de fusión alrededor del borde de la capa de hielo", ha explicado.

Hasta ahora, los lagos supraglaciares se han formado en las elevaciones más bajas de todo el litoral de Groenlandia, en una banda que es más o menos de unos cien kilómetros de ancho. A mayor altura, el clima de hoy es demasiado frío para la formación de los lagos.

En el estudio, los científicos utilizaron observaciones de la capa de hielo mediante los satélites de teleobservación del medio ambiente operados por la Agencia Espacial Europea y estimaciones de la futura fusión del hielo extraídas de un modelo climático para realizar simulaciones de cómo fluirá el agua del deshielo y se estancará en la superficie de hielo para formar lagos supraglaciares.