Impulsado por el programa LIFE de la Comisión Europea, validará una metodología que cuantificará los intercambios de gases de efecto invernadero y servirá de objetivo para las políticas climáticas de uso de la tierra y la silvicultura.

El objetivo de este proyecto es generar datos sobre el secuestro de carbono en humedales que contribuirán a alimentar los análisis del Panel Intergubernamental de Cambio Climático, así como para elaborar pautas de gestión que aumenten su papel como sumideros.

Los humedales poseen un gran valor ecológico por la diversidad de especies que acogen y por su labor de purificación del agua que alimenta otros ecosistemas, teniendo en cuenta la sequía de la península Ibérica.

A pesar de esto, según los estudios de diversos organismos científicos, los humedales están desapareciendo tres veces más rápido que los bosques, y su degradación puede llevarles a dejar de almacenar gran cantidad de carbono para empezar a emitirlo, con las consecuencias que esto tendría para el calentamiento global.

LIFE W4C se implantará en 10 humedales piloto representativos, distribuidos por diferentes lugares de la península Ibérica, mediterráneos, costeros y de interior.

La metodología que se va a implantar permitirá ofrecer a las empresas la compensación voluntaria de sus emisiones, a través de proyectos de restauración financiados por fondos para la conservación, con la finalidad de impulsar el camino hacia una economía descarbonizada.