Los expertos de Investigación y Desarrollo de Técnicas Microbiológicas para la Mejora de Suelos de Interés Agrícola de la Universidad de Almería (UAL) ha concluído cuáles son los factores claves que intervienen en la mejora y el control del compostaje de los residuos vegetales agrícolas. Así, mediante una nota de prensa, han indicado que esta técnica "se suele utilizar en agricultura para transformar, de forma biológica, todo tipo de restos orgánicos en nutrientes homogéneos y asimilables por las plantas". 

Los investigadores han descrito los mecanismos implicados en la biodegradación de la materia orgánica en un artículo titulado: 'Tracking organic matter and microbiota dynamics during the stages of lignocellulosic waste composting', publicado en la revista Bioresource Technology. 

"Hemos identificado cuáles son las etapas críticas y específicas para este tipo de residuos, así como las operaciones más idóneas para cada una de ellas. Así, el control es más preciso, lo que implica una mayor eficacia y la obtención de compost de mayor calidad", explica la investigadora de la Universidad de Almería, María José López

El equipo de expertos preparó, en primer lugar, la cantidad necesaria de residuo vegetal para el ensayo de compostaje, un proceso que se prolongó durante seis meses. Según López, en cada etapa del proceso de biodegradación recogieron diferentes muestras "en las que se cuantificaron las bacterias y hongos presentes y se analizó su efecto en la transformación de la materia orgánica, permitiendo de esta forma identificar los factores claves", indica López. 

"El producto obtenido resulta valioso desde el punto de vista agronómico, ya que además de favorecer el reciclaje de forma segura, los residuos orgánicos generados en agricultura, permite el retorno al propio sistema de un sustrato de elevada calidad como fertilizante", sostiene López.