La parlamentaria ha asegurado en un vídeo de Facebook que estas firmas son una muestra del nivel de frustración de la población y el compromiso para adoptar acciones contra la crisis climáticas ya.

Australia es uno de los países más vulnerables ante el cambio climático y que más consecuencias ha sufrido a causa de él, como el blanqueamiento de los corales de la Gran Barrera de de Arrecifes, los importantes incendios y las numerosas épocas de sequía.

Sin embargo, los ecologistas critican el interés de Camberra, capital australiana, de seguir su expansión de la industria de combustible fósil, una medida contraria al acuerdo firmado en París para tratar de reducir el calentamiento global y la subida de las temperaturas respecto con las de 2005.

Desde 2013, Australia presenta una constante subida de las emisiones de gases contaminantes a la atmósfera, año en el que el partido conservador entró en el poder y derogó el impuesto de emisiones. En la actualidad, este país es el responsable del 5% de las emisiones globales de gases contaminantes.

Los expertos prevén que este porcentaje ascienda hasta el 17% en 2030 y que Australia que se convierta en uno de los países más contaminantes del mundo si no se toman acciones al respecto urgentemente.