Los osos polares son una de las especies más amenazada por el cambio climático. Desde 2003, la organización WWF ha monitorizado a docenas de osos polares a través de un collar con un dispositivo GPS con el que han recogido datos de sus movimientos a lo largo de más de una década. Con estos datos, la organización podrá saber exactamente dónde van y dónde se encuentran los osos polares y, por tanto, apreciar la evolución del cambio climático en la zona polar.
Es el caso de este vídeo que muestra el seguimiento exhaustivo de uno de ellos: Kara, una hembra controlada por los investigadores desde la primavera de 2013 y las consecuencias que está teniendo el cambio climático en la Antártida.
El archipiélago Svalbard se sitúa en el océano Glacial Ártico y forma parte de Noruega. El vídeo muestra las dificultades de la travesía de Kara, superpuesta sobre el hielo del Ártico, y cómo los efectos del cambio climático son palpables en esa zona y desastrosos para las especies que en ella habitan.
El oso polar es un animal singular, un gran depredador terrestre que aprendió a vivir en el mar, y que depende del hielo marino para cazar. Sus presas favoritas, las focas anilladas, prosperan en las aguas cubiertas de hielo sobre la plataforma continental, aguas poco profundas y muy productivas.
En Svalbard, el aumento de temperaturas está derritiendo el hielo y transformando el paisaje del Ártico, al que los osos polares se adaptan poco a poco. Allí encuentran comida, un sitio dónde descansar, y un refugio para parir a sus crías. Y los osos están dónde prosperan las focas.
HA RECORRIDO 3.700 KILÓMETROS
HA RECORRIDO 3.700 KILÓMETROS
La travesía de un oso polar permite apreciar la evolución del cambio climático
Desde 2003, la organización ecologista World Wildlife Fund (WWF), a través del WWF Polar Bear Tracker, ha estado siguiendo a docenas de osos polares a través de collares puestos a los animales con dispositivos GPS, siempre hembras, ya que los collares resbalan en los cuellos de los machos.
Agencias | Madrid
| 10/12/2014