El Etna constituye el mayor volcán activo de Europa en la isla de Sicilia (Italia). Las últimas erupciones en su cráter sureste han provocado que su altitud aumente en 33 metros, situándose a un nivel récord de 3.357 metros por encima del nivel del mar.

Así, el Instituto italiano de Geofísica y Vulcanología (INGV) ha afirmado que el cráter noreste, que había sido el pico de mayor altitud del Etna en las últimas cuatro décadas con 3.324 metros de altura, queda ahora por detrás del cráter sureste.

Este cráter, el más joven y activo del volcán, ha ido acumulando las capas de lava y material piroclástico que ha ido expulsando a lo largo de las erupciones, de manera que su morfología se ha transformado desde el 16 de febrero, día en el que se produjo su primer episodio de este año.

La última erupción de este cráter sureste tuvo lugar ayer, pero el INGV no la contempla porque corresponde a un estudio cuyos datos fueron registrados durante el mes de julio, dentro de la iniciativa internacional Geohazard Supersites and Natural Laboratories.

Las imágenes satélite obtenidas entre el 13 y el 15 de julio permitieron reconstruir la tipografía del volcán con un margen de error de tres metros.