Los lagos volcánicos son producto de la actividad volcánica. Estos lagos se forman en el cráter formado por el volcán y sus aguas presentan diferentes colores, que pueden ser de un verde ácido debido a los gases volcánicos o ser casi cristalinas.

El lago volcánico Monte Mazama de Oregón en Estados Unidos es uno de los más conocidos. Este lago de agua dulce, llenado únicamente con lluvia y nieve, es el más profundo del país.

África es otro de los escenarios que alberga uno de los lagos más espectaculares. Estos lagos protegidos, que abarcan zonas de Uganda, República Democrática del Congo, Ruanda, Burundi y Tanzania, se encuentran rodeados por algunas de las montañas más altas de África.

El volcán Pinabuto entró en erupción en 1991, y se convirtió en la segunda mayor erupción volcánica del siglo XX. Sin embargo, se cree que una erupción mucho mayor hace 35.000 años fue la causante del lago volcánico.